Sí, sí, como suena: al día siguiente de tomar posesión del juguetito.
¿Pero vamos a permitir que estos tíos arruinen aún más a España y a los españoles? ¿Pero qué broma es ésta? El nuevo ministrogurú de la Economía liberal Guindos afirma que España entrará nuevamente en recesión-antesala de la ruina en 2012, que el número de parados sobrepasará los 5 millones de parados, y que es muy difícil hacer previsiones para más de seis meses,
¿Pero no eran tan listos, no eran los primeros de la clase, no alegaron que era su turno para jugar a la política, no dijeron que esto lo arreglaban rápido porque era cuestión de confianza? Ésta es su primera estafa al pueblo español. Ustedes sí que son mentirosos, no nos han dicho la verdad y nos engañaron, ¿recuerdan el infinito latiguillo? Ustedes nos engañaron desde antes del primer día. Además de mentirosos, cínicos.
Y entran en una diarrea legislativa. Sáenz de Santamaría afirma que el viernes marcará el estilo del Gobierno, y que la ‘labor legislativa’ del Gobierno va a ser muy grande. Pero ya se sabe que las diarreas, y más las legislativas, no sirven para nada: son disculpas retardatarias. No nos vengan con pamemas ni rollos macabeos de hay que dar tiempo al tiempo, herencias recibidas, no hay milagros, los resultados se verán en el momento oportuno, y similares. El carnicero ya no nos fía y en cambio a ustedes, sí. Ésa es la diferencia.
Ustedes no lo arreglan porque, como los anteriores, no tienen valor cívico ni democrático. Si quieren lo pueden solucionar en un día: es tan fácil como subir los impuestos igual que Suecia, que tanto les gusta y envidian, y hacer por un único decreto, que más tarde se ratificará en el Parlamento, que ningún español en edad laboral tenga una renta mensual de menos de mil euros. La renta per capita de España es buena, pero, como saben o hacen que no saben, está mal repartida. No hay ningún país de Europa en que esté tan injustamente repartida la riqueza. Hagan la revolución de repartirla bien socialmente, y saquen el dinero de debajo de las piedras, armamento, iglesia, Corona, gastos oficiales, ya saben. Lo demás son camelos y trampantojos con los que quieren entretener al personal en su miseria. Lo que ocurre es que a ustedes se les ha acabado el crédito, fíjense qué cosas, ya están ustedes en el Guinnes de los récords de los lentos e inútiles salvadores. Hale, hale, todos a retozar en las heces de lo político. ¡Si ni siquiera han sido capaces de indicar a los españoles qué tipos, qué clases, qué modalidades no de contratos, que ya sabemos que serán leoninos, sino de nuevos trabajos van a propiciar y crear, que es la cuestión esencial! ¡Todo lo contrario: dicen que van a fomentar el turismo! Ustedes son la más pura y desvergonzada ortodoxia del neoliberalismo del tea-party. Dan pavor. Ustedes solo saben hacer la revolución de alancear al débil.
ARTURO GONZÁLEZ
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