martes, 13 de diciembre de 2011

ARRUINAR UNA COMUNIDAD

Javier Arenas en El Mundo: “Los derrochadores que dejan en quiebra lo que gobiernan deberían ser juzgados”. Le leo y pienso en Francisco Camps, el president que ha convertido a la Comunidad Valenciana en una de las autonomías más endeudadas del país. Camps ya está en el juzgado, acusado de recibir más de 12.000 euros en sobornos de la Gurtel. Sin embargo, lo de menos son esos 12 trajes, cinco pares de zapatos, cuatro corbatas y cuatro americanas que le regaló “su amiguito del alma”, El Bigotes. Es barato, comparado con lo que hemos pagado los ciudadanos por su gestión.

Durante la presidencia de Camps, se arruinó la Caja Mediterráneo, bajo el control del PP valenciano. Sanear este agujero ha costado, por ahora, 5.249 millones de euros: a 720 euros el traje (tarifa Bigotes), son 7,29 millones de trajes. También quedó al borde de la quiebra el Banco de Valencia. De momento, ha aparecido un boquete de 562 millones: 780.000 trajes más.

Bajo su mandato, el talonmanista Urdangarin facturó 3,5 millones de euros de la Generalitat. El caso es tan escandaloso que hasta la Casa Real dice que el comportamiento del duque no ha sido “ejemplar”. Traducido en trajes: casi cinco mil más.

Durante su presidencia, el arquitecto Santiago Calatrava cobró 15 millones de euros por el diseño de unos rascacielos que nunca se construyeron; es la maqueta más cara de la historia. Son más de veinte mil trajes.

Y bajo la gestión de Camps, la Gürtel también facturó no menos de 14 millones de euros a la Generalitat: otros 19.000 trajes.

¿El total? 5.843 millones de euros. Al cambio Camps, equivalen a 8,1 millones de trajes por los que el molt honorable también debería asumir su responsabilidad.


FUENTE. ESCOLAR.NET

No hay comentarios:

Publicar un comentario